la hora exacta

este es mi reloj, lo compré en el barrio hippie de san francisco, en una tienda de lo menos hippie que se puedan imaginar, a un precio de lo menos hippie que puedan estar pensando.
al ponerlo en mi muñeca noté que tenía la hora bien, o sea no tuve necesidad de ajustar la hora, de hecho todavía no sé como se hace.
es increíble lo sincronizado que está, tiene la misma hora que el reloj del living, el que todas las mañanas silenciosamente me avisa que estoy tarde otra vez. tiene la misma hora que el reloj del lift, donde cuento los segundos para que lleguen las cuatro y poder cerrar así otro dia de trabajo.
acá está todo en armonía con mi reloj. me da tanto miedo lo que pueda suceder al volver, me aterra pensar que al segundero le pueda venir una depresión al verse tan solo y aislado en su pequeño circulo negro, o que el horario y el minutero, por culpa de una pelea sin sentido, se nieguen a seguir girando en la misma dirección.
acá todo anda bien, funciona de maravilla y me da la hora exacta para dormir o despertar y acompañarme durante las 24 horas del día. todo anda tan bien que me aterra pensar lo que pueda suceder cuando vuelva.